Además de Maconí, hay por lo menos una treintena de comunidades que se ubican entre los municipios de Cadereyta, San Joaquín, Amealco y Ezequiel Montes en el estado de Querétaro que no solo tienen carencia de agua, sino también de infraestructura eléctrica y carretera; muchos de esos pobladores se sumaron a la marcha que partió desde la sierra el pasado viernes 20 de octubre y que arribó este martes 24 de octubre a la capital del estado, recorriendo alrededor de 180 kilómetros para exigir al gobierno estatal abasto de agua.
Y aunque el gobernador Mauricio Kuri Gonzáles declaró ante los medios de comunicación que habría dialogo abierto con los manifestantes a la fecha ni él, ni ningún funcionario ha recibido a los pobladores de dichas comunidades, quienes mantienen un plantón en las inmediaciones de la Plaza de Armas, donde se alberga el gobierno estatal, aguantando además del cansancio por la larga caminata la lluvia generada por el huracán Otis.Solo han encontrado la solidaridad de los ciudadanos queretanos, estudiantes y organizaciones como La Casa Obrera de Querétaro que les ha brindado alojo.
Por su parte, tanto Kuri González como el titular de la Comisión Estatal de Aguas (CEA), Luis Alberto Vega Ricoy declararon que desde hace tiempo se hay pláticas con los inconformes y que se tiene asignado una “bolsa” de 7 millones de pesos para atender esta problemática que afecta a por lo menos 20 comunidades.
Cabe mencionar que este miércoles el Gobierno de Querétaro entregaría una suma de 2 mil 380 millones de pesos a al Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) como garantía para la construcción de dos subestaciones eléctricas y 19 centros de carga y que se estima tendrá un costo de cerca de 6 mil millones de pesos. Para solventar esa obra -que además corresponde financiar al gobierno federal y no al estatal- se obtuvo un crédito que dejará endeudado a los queretanos y que beneficiará principalmente a los empresarios.
José Lugo, subdelegado de la comunidad Puerto de la Luz en San Joaquín, precisó que el pequeño aguaje que tienen cercano a este poblado no es suficiente pues abastece a siete comunidades, “realmente no tenemos agua porque no nos acompletamos”, señaló. Agregó que además del desabasto del vital líquido carecen de infraestructura carretera: “El camino… tenemos alrededor de 28 años que lo hizo el gobernador Enrique Burgos, y así como hizo esa brecha, así nos han dejado todos los gobiernos, tanto municipal como estatales, nunca le han dado prioridad al camino, a manera de que lo mejoren y todo tiempo llegan al Palacio de Gobierno, pero nunca hacen la visita a manera de que se den cuenta como está el camino”, detalló.
Explicó que el desbasto de agua está afectando la impartición de educación en la comunidad pues por la falta de agua, tanto alumnos como maestros ya no quieren acudir a las escuelas y que esto afecta desde el nivel de preescolar hasta bachillerato, ya que en ninguna escuela tienen agua.
“Entonces, ya estuvo bueno esto de que se encierren en su oficina y no le den seguimiento a estos asuntos que tienen por encima ellos. Que le quede claro al señor Gobernador, nosotros no venimos a buscar problemas, venimos a buscar soluciones para que le dé prioridad a la marcha, que se le dé prioridad al asunto; él no sabe, porque no conoce las comunidades. Si el caminara las comunidades se daría cuenta que es lo que carecen.”
Las comunidades de San Agustín, Los Llanos, San José Carrizal, Santa María de Álamos, La Zarza, Ocotitlán, Puerto de la Luz, San Bartolo, Las Joyas, Camarones, que concentran alrededor de 20 mil personas, son las que presentan carencias de agua en el municipio de San Joaquín. “Ya es justo de que le cumplan a la gente, no solo promesas. Tenemos una petición que hemos hecho desde hace seis meses respecto al concreto hidráulico y hasta la fecha no nos han dado respuesta. Después de ahí fueron el subdirector de Aguas estatal a checar el manantial y supuestamente trajeron dos frascos de agua para darle seguimiento al laboratorio si es que era viable para tomar, y hasta la fecha no nos han dado respuesta. Entonces ya estuvo bueno de mentiras, porque las mentiras no sirven de nada”, señaló.
Por su parte Martín Hernández Barrón, subdelegado de la comunidad Las Joyas El doctor, del municipio de Cadereyta destacó que hace más de 20 años se inició un proyectos que tenía contemplado muchos millones de pesos que dejaron “abandonados”.
“La carretera está como la dejó la maquinaria, no tiene alcantarillas, no tiene cunetas, por ahí hace tres o cuatro años le hicieron baus a la carreta, mandaron gente que no son ni albañiles, los baos no desaguan la carretera, cada que llueve se descompone. Entonces, lo que queremos pedirle al gobierno estatal, federal o municipal es que se unan y nos pongan concreto hidráulico, ya no queremos que a nuestra carretera le pongan tierra”.
Señaló que ha estado a punto de renunciar pues los subdelegados no tienen ningún tipo de percepción, ni apoyo económico y a veces tienen que atender a los pobladores incluso a media noche. Comentó que pese a que tiene dos años desempeñándose como subdelegado, el presidente municipal se ha negado a reunirse con él.
Respecto al desbasto de agua comentó que las autoridades envían una pipa que puede pasar en 15 días, un mes o más tiempo para abastecer a todo el poblado, la cual depositan en un tinaco que pusieron en la carretera, y como es insuficiente los pobladores tienen que acudir a un manantial que se ubica unas dos horas de la comunidad.
Aunado a esto se tiene otros problemas de infraestructura: “Tenemos una obra inconclusa que el presidente municipal se comprometió a dar seguimiento, cosa que no se le ha dado, para nada. Se nos estaba cayendo un poste de luz, nos prometió ocho bultos de cemento y cal, ya mejor los pagué yo. Tenemos todavía personas que no tiene luz. Tenemos más o menos 20 años igual, que se hizo la electrificación, pero hay personas que todavía no tiene el servicio de luz, ya viejitos, que ya se van a morir de viejitos y no han disfrutado de la luz, se aluzan con lo que nosotros nombramos aparatos de diesel, es un botellón y le ponen una mechita, de esa manera se están haciendo luz. La carretera son 21 kilómetros que no tiene pavimiento, ni concreto hidráulico, finalizó.