Normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, presentes en un libro infantil

De forma lúdica, el libro “El maestro no ha venido” aborda el tema de la inseguridad y la violencia con la idea hacer conciencia en los niños y sembrar una semilla de esperanza en ellos de que el país puede mejorar

Elena González/ Fotos Redacción Periscopio CDMX/

¿Cómo explicar a los niños la situación de inseguridad y violencia que se vive actualmente en México? Es el dilema que plantean las autoras del libro El maestro no ha venido, un texto dedicado a los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos y que está dirigido a un público infantil, matizando el tema con arte a través de la escritura poética de Marcela Arévalo Contreras, acompañada de ilustraciones lúdicas, autoría de la diseñadora gráfica Natalia Gurovich.
La historia es real, afirma su escritora, y gira en torno a un niño campesino de la sierra de Guerrero mortificado por la desaparición repentina de su profesor, quien le despertó la fascinación por la escuela, a donde acude con gusto pese al largo trayecto que tiene que recorrer para llegar a ella, además del agotamiento que padece día a día al tener que trabajar para apoyar a sus padres. En el aula, Cuco, el protagonista del libro, además de aprender a leer y escribir ha descubierto lo grande y fascinante que es el mundo, pero sobretodo, su maestro le ha enseñado a razonar, opinar y a defender sus derechos.

Uno de los niños que asistieron a la presentación del libro participa en la ronda de comentarios y preguntas.

El libro se ha presentado en diversos foros, incluso en un plantón que realizaron los padres de los normalistas frente a las instalaciones de la Fiscalía General de la República. A principios de este mes se presentó por segunda ocasión en el Museo Casa de la Memoria Indómita, ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México. “Un espacio emblemático, en donde la bandera es tener siempre presente lo que no queremos y no permitiremos que se repita. Y nosotras, Natalia a través de sus ilustraciones y yo, a través del texto, lo que pretendemos con El maestro no ha venido es que no se olvide aquello que tanto duele, comentó Arévalo Contreras durante su presentación.

La autora narra que este libro nació por el deseo de encender una luz de esperanza en los niños, quienes merecen vivir en un país donde haya justicia, donde haya derechos, seguridad y paz. “Un país con maestros que no desaparezcan, porque sin ellos, a ver, quien nos va a enseñar a multiplicar, a dividir a sumar, a razonar a leer. La historia de Hugo, el protagonista del libro es una historia real y yo la escribí para crear conciencia y para que no seamos indiferentes, para que no olvidemos.”

Los ejepmlares de «El maestro no ha venido» se agotaron.

Esta idea se plasma en el fragmento del libro que dice: “Hace muchos días que Cuco está triste y su tristeza no va a desaparecer hasta que regrese su profesor, ¿A dónde se fue?” Y recurriendo al imaginario de los niños, la escritora plantea: “Hace ya cinco años que los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecieron y no fue un mago con su varita mágica quien lo hizo, y es que para los niños… o si no, díganme ustedes si no es raro escuchar que las personas puedan desaparecer, sin varita mágica y sin magia. Entonces como explicarles que 43 jóvenes que estudiaban para ser maestros, son hoy 43 desaparecidos a quienes sus papás buscan sin parar desde entonces ¿Se imaginan?”
Y expone a los niños que asistieron a la presentación un escenario hipotético. “Les voy a preguntar: imagínense, que un día llegaran a la escuela y de repente, la maestra o el maestro no llegó. Y ustedes, ¡aay qué padre, no va a haber clases!, pues sí…pero al otro día regresan a la escuela y tampoco, e igual, ¡ay qué padre, dos días sin clase!..Pero pasan tres días, cuatro y ya empiezan a preocuparse, empiezan a aburrirse y a decir: a ver, qué está pasando, ¡Dónde está mi profesor? Entonces van con la directora, pero la directora no tiene ni idea de dónde está. Le hablan a un detective privado, nada, nadie sabe nada. ¿Se imaginan?»
Este es el cuarto libro de de Marcela Arévalo, otras obras de su autoría son Los abuelos son de Marte, De los gustos y otras cosas y Mamá esta triste. Es originaria de la Ciudad de México y se dedica al oficio de las palabras: es publicista, traductora y editora.

La ilustradora Natalia Gurovich participó en a actividad que se realizó al finalizar la presentación del libro.

Natalia Gurovich nació en Santiago de Chile y desde 1993 vive en la Ciudad de México. Es licenciada en diseño gráfico por la Universidad Católica de Chile. Hasta la fecha ha publicado 16 libros para niños en editoriales nacionales y extranjeras y sus dibujos también han aparecido en varias revistas. En el 2008 ganó el segundo lugar en el concurso de cartel de la FILIJ. En el 2010 obtuvo mención honorifica en el catálogo Iberoamericano de Ilustración.
“Hoy el corazón le duele un poco más que ayer, y Cuco mirando al cielo pide un deseo con anhelo. Hace mucho tiempo ya, tengo miedo sobre esto, sabe que se fue a luchar para el pueblo de coral, por eso le pido al sol y a toditas la estrellas que le traigan por favor de vuelta a su profesor”, así finaliza el libro.
Actualmente, la población infantil ha pasado de ser espectadora de la violencia a ser víctima. De acuerdo con un reportaje de BBC, en México cada día asesinan a tres niños y otros siete desparecen.

Los asistentes al evento plasmaron sus sentir sobre el temas a través de dibujos.

Redacción Periscopio CDMX

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